El jueves después de Pentecostés se centra en el sacerdocio de Cristo.

La fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote se celebra en numerosos países el jueves siguiente a la solemnidad de Pentecostés. Esta fiesta tiene su fundamento en el sacerdocio de Cristo, como se cita en la Carta a los Hebreos 4, 14-16: "Teniendo, pues, tal Sumo Sacerdote que penetró los cielos -Jesús, el Hijo de Dios- mantengamos firmes la fe que profesamos. Pues no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino probado en todo igual que nosotros, excepto en el pecado. Acerquémonos, por tanto, confiadamente al trono de gracia, a fin de alcanzar misericordia y hallar gracia para una ayuda oportuna".

Esta fiesta fue introducida en España en 1973 con la aprobación de la Sagrada Congregación para el Culto Divino. También se celebra en países como Chile, Colombia, Perú, Puerto Rico, Uruguay y Venezuela, siendo conocida como la “Jornada de Santificación de los sacerdotes”.

Otro aspecto importante de esta fiesta es el que involucra a todos los fieles pues por el sacramento del bautismo, todos hemos sido configurados con Cristo Sacerdote, Profeta, y Rey.